Ya no soporto este calor, tampoco esta humedad, ya son las 3 de la tarde y este evento no parece avanzar, mucho menos terminar. Hay una gran cantidad de personas en este pequeño espacio, todas acaloradas y en su mayoría sudorosas; este no es el clima adecuado para una reunión de este tipo y me resulta increíble que estén tan cargados de vestimenta. Todo esto me hace recordar que no estoy solo; en este lugar hay otra persona acompañándome… estoy con ella.
No deseo recordarme ya que eso me hace sentir más como un tonto por haber utilizado aquellas palabras. Un idiota, definitivamente lo soy, ya que en toda mi vida he pensado detenidamente cada palabra que digo, cada paso que doy, pero… mi desesperación había llegado a tal grado en aquella playa que de mi boca salieron esas palabras – lo siento, me tengo que ir, surgió algo, en alguna otra ocasión te acompaño adonde desees.
Ahora eme aquí rodeado de gente de su misma especie – seres andróginos vestidos de tonos rosas y algunos que pareciera que solo visten cortinas negras con nubes rojas. Pero quién soy yo para juzgar, ya que mi apariencia no difiere demasiado de ellos; mi apariencia: un trozo de hueso falso fabricado de un material solidificado y colocado en un extremo de mi cabeza y en su cuello una especie de banda de tela con metal en la que al menos tuvo la sutileza de colocar la marca de mi empresa, en cuanto a mi vestimenta apenas verme en un espejo borre instantáneamente esa imagen de mi memoria y lo cambie por lo que vestía la última vez que fui a Milán.
A ella, no deseo siquiera voltear, y verla ya que cada que la observo empiezo a recordar lo que llevo puesto; además, no se diferencia demasiado de las demás personas de este extraño séquito. Con su traje que según ella es tributo a sus programas favoritos.
¡Oye! , ¡Oye! Vamos ya es hora del karaoke.
Y así, una vez más me sujeta de la muñeca y me arrastra a una travesía sin beneficio ni razón de ser solo el gusto de hacer cosas extrañas.
Avanzo solo unos pasos y llego a una muy pequeña fila de personas que parecieran tomar turnos para subir a un muy pequeño escenario y tomar el micrófono. ¡Japonés! , se una gran variedad de idiomas; el Japonés no es uno de ellos, se Coreano y un poco de Mandarín pero eso no evito que hiciera un gigantesco ridículo en ese escenario. Ella gritaba y gritaba y no dejaba de gritar dando saltos junto a todos los presentes mientras yo cambiaba de colores cual si fuera un camaleón.
En el concierto que le siguió, pareciera no querer desistir en su empeño – aun seguía saltando y gritando; hasta llegue a pensar que no le importaba quien estuviera en ese escenario y efectivamente en ese escenario no se encontraba ninguna persona.
¡Concierto! Claro… eso era un show animado en tercera dimensión de una niña de pelo verde y coletas, acompañada con una gigantesca cantidad de personajes raros aunque no del todo desagradables.
¡Vamos!, haya hay ramen ¡comamos!
Veía venir lo inevitable, ha ese monstruo destrozar a cuan pobre criatura se acercara a sus fauces. Me sujeto de nuevo, esta vez del brazo, me dijo que tomara asiento junto a ella y mientras servían la comida, señalaba a cuanto personaje curioso pasaba por su ángulo de visión, describiéndolos cual enciclopedia parlante; y mientras tanto yo, volteando ha ver inevitablemente.
Mira, Mira ese “Mecha” de haya es “Jaguar” de “Corazón de Jade” está peleando contra un
“mobil suit”, ¡genial!
Solo es un tipo con cartón encima.
¡Hah! y ahí está “Ion” de “Star Atom”
No se ve tan mal pero aun así tiene demasiado metal en esa chaqueta.
Y ahí atrás de esa pancarta, ese chico esta disfrazado de “Dazz” de
“The Last Shadow”
Ok, ¿un seudo militar?
Y mira esa chica esta disfrazada de “Rika” de “Wisper”, no me imagino cuanto le costó hacer que el pelo se le viera de esa manera.
¿Pero que tiene en el cabello?
¡No!... ¡¡Ponis!! , ¡Mira! ! Mira! están todas las de la serie.
¡Diversión! ¡Diversión! ¡Diversión!
¡Pobres criaturas! , los tiñeron de varios colores y ha ese de color rosa le rizaron el cabello, ¡lamentable! que dirían los de PETA .
¡AH! Ya vino la comida, comamos…
Al menos esa comida servirá de corcho para su boca.
“está bien comamos…”
Me encontraba resignado, solo empecé ha comer intentando no verla ya que acabaría totalmente con mi apetito; la comida no estaba mal, casi parecía ramen de verdad, en mi embelese olvide por un segundo con quien estaba, levante un poco la mirada hacia ella y observe algo que sin duda alguna me sorprendió y creo que jamás lo hubiera esperado.
Allí estaba ella comiendo, creo que jamás la había visto tan concentrada – sostenía con una mano su cabello y con la otra sutilmente unos palillos que sostenían un pedazo muy pequeño de carne.
Esta era la primera vez que la veía tornarse tan sería y sin duda alguna ¡la única ocasión en la que no estaba sonriendo! , su concentración es inconcebible – la forma en que mueve su mano ondeándola en el aire de tal manera; cualquiera diría que se encontraba ejecutando una antigua danza tradicional en una función profesional.
Terminamos de comer y ella aun no deja de sorprenderme; En el mismo momento que tomó el último bocado regresó totalmente a su yo anterior. Antes me encontraba intrigado pero ahora reconozco que su existencia en este mundo rebasa totalmente mi entendimiento.
La tarde está por terminar y debo admitir que al final, el día no se torno del todo desagradable.
Ya no me es del todo molesta esa sonrisa sin sentido y lo mejor del día que ni una sola vez me ha llamado Lloyd.
¡oye! , ¡Lloyd! Ven, ven, ya casi comienzan las presentaciones de cosplay, ¡vamos! , ¡Vamos! ¡Corre!.
A partir de mañana no me acercare a esta chica.
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Jajaja, me sorprende que después de todo el protagonista crea que sera fácil alejarse de una chica tan energica.
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